Qué nos dicen y por qué son importantes.
Nuestras emociones desempeñan un papel fundamental en nuestras vidas. Nos ayudan a comprender el mundo que nos rodea y a decidir cómo reaccionamos ante determinadas situaciones.
Hay seis emociones básicas que todo el mundo reconoce: alegría, tristeza, miedo, ira, asco y sorpresa. Estos sentimientos tienen funciones importantes y nos muestran lo que ocurre en nuestro interior. Quizá conozcas la película de Disney «Del revés», que se ha hecho famosa entre los terapeutas. En esta película, la interacción de las emociones se muestra de forma especialmente vívida. Quizá te apetezca verla, te la recomiendo de verdad 🙂
A veces, sobre todo en fases de la vida con crisis tras experiencias difíciles o, en casos extremos, tras los llamados traumas, nuestros sentimientos y su interacción también pueden confundirse. Esto significa que o bien los sentimos muy intensamente o apenas los reconocemos. Es importante comprender qué significa cada sentimiento y cómo puede ayudarnos a afrontar mejor las situaciones difíciles.
Las seis emociones básicas y sus funciones
De forma similar a una rueda de colores, los sentimientos básicos forman el marco básico. Todos nuestros matices emocionales se mezclan a partir de ellos, por así decirlo. Son los ingredientes de nuestro mundo emocional 🙂
1. alegría
La alegría es el sentimiento que literalmente nos hace felices. Nos muestra lo que es bueno para nosotros y lo que disfrutamos haciendo. Cuando sentimos alegría, es señal de que vamos por el buen camino y de que algo bueno está ocurriendo en nuestras vidas. Sentimientos relacionados: satisfacción, alivio, orgullo, gratitud, curiosidad, euforia, éxtasis, sensación de fluir y mucho más. Por último, pero no por ello menos importante, sobre todo al principio de una relación: enamoramiento 🙂 y en el transcurso del amor.
2. tristeza
La tristeza nos ayuda a procesar las pérdidas. Cuando estamos tristes, eso demuestra que echamos de menos algo que nos parecía positivo o a alguien (por ejemplo, una persona). La tristeza nos da la oportunidad de hacer una pausa, reflexionar y despedirnos de las cosas que ya no están. La tristeza debe procesarse para poder despedirse de ella y retomar la vida. Sentimientos relacionados: impotencia, decepción, soledad, culpa, desesperación, nostalgia
3. miedo
El miedo es un sentimiento protector. Nos advierte del peligro y nos ayuda a tener cuidado. Los síntomas de ansiedad suelen experimentarse como muy intensos, pero no son peligrosos ni siquiera a gran escala. Muchas personas que experimentan ansiedad con frecuencia también desarrollan el llamado miedo a la ansiedad. A veces la ansiedad se siente muy intensamente, sobre todo si hemos tenido experiencias traumáticas. En estos casos, nuestro cuerpo reacciona como si hubiera un peligro abrumador, aunque en realidad estemos a salvo. Sentimientos relacionados: aprensión, pánico, inseguridad, vergüenza.
4. ira
La ira surge cuando sentimos que nos han tratado injustamente o cuando algo nos hiere. Es un signo inequívoco de violación de los límites y nos da energía para defendernos o defender algo que es importante para nosotros. Si te enfadas a menudo, puedes ocuparte de tus relaciones sociales y de tu propio comportamiento o necesidades. La ira no debe reprimirse, sino canalizarse. Sentimientos relacionados: frustración, irritación, indignación, odio
5. asco
El asco nos protege de cosas que podrían perjudicarnos, como la comida estropeada o las situaciones peligrosas. Nos ayuda a mantenernos sanos y a alejarnos de cosas que podrían perjudicarnos. Sin embargo, el asco también es una emoción fuertemente aprendida que puede adquirirse. (por ejemplo, la aversión a las arañas suele transmitirse de padres a hijos). Esto significa que el asco también tiene un componente social cuando determinados grupos evitan ciertas cosas. Sentimientos relacionados: aversión, desprecio, incomodidad, asco.
6. vergüenza
La vergüenza puede mostrarnos que hemos hecho algo mal en un contexto social, por ejemplo, que hemos infringido normas sociales. También se manifiesta cuando pensamos que otras personas pueden juzgar negativamente nuestro comportamiento o apariencia. A menudo conduce a un deseo de retraerse y esconderse. Sentimientos relacionados: Vergüenza, bochorno, culpabilidad, dudas sobre uno mismo, humillación, inseguridad
Emociones y traumatización
Tras una experiencia traumática, nuestras emociones pueden volverse muy confusas. Las personas traumatizadas experimentan A menudo experimentan miedo, ira o tristeza intensos. A veces se sienten entumecidos y apenas se dan cuenta de lo que ocurre en su interior. Estas reacciones son normales, pero es importante encontrar una forma de volver a enfrentarte a tus sentimientos con seguridad. Trataremos el tema de la traumatización en otro artículo.
¿Te gustaría también hablar abiertamente con tu pareja sobre tus deseos y necesidades y trabajar juntos en vuestra relación?
Entonces, ¡consigue la aplicación ahora y empieza hoy mismo!
Saludos de tu equipo PaarGespräch